"Yo te contaré cada día un cuento, y tu me regalarás tu mirada"

domingo, 8 de diciembre de 2013

Mi casa


Vivo siempre en mayo. Cada uno puede elegir donde vivir. Y no es que mayo sea especial. A veces hace frío, un frío que de no ser porque sé que es mayo cualquiera diría que es diciembre. Otras veces, cuando menos lo espero, las tardes dejan que el sol se esconda más o menos a las seis. Sé que es mayo, de eso no hay duda, pero puede que sea un mayo cansado y tenga sueño. ¿Enfadarse? ¿Por qué?, no todos pueden tener la suerte de vivir un mayo eterno, por eso le perdono esas pequeñas licencias que no tienen mayor importancia. Como cuando me esconde las flores y deja que pase el tiempo, a menudo demasiado tiempo, casi hasta que mi esperanza roza las espinas del limonero y, entonces, cuando estoy distraído mirando los inviernos de otras gentes, un olor que conozco llega hasta mí, vuelvo la vista y ahí están, un manto de amapolas y almendros en flor que ni el mejor mago habría podido sacar de mil chisteras ni de un millón de mangas de la talla XXXL. Así es mi mayo, y así sabe él que soy yo. A veces me cuenta historias de otros meses, yo le atiendo como si creyese en lo que me cuenta, pero sé que son fábulas. Me habla de meses en que las hojas caen de los árboles, como si yo no supiese que eso es imposible, y de meses donde no hay nada, solo un viento molesto que viene siempre del oeste y oscuridad, invierno me dice que se llama a esos meses, y le pongo cara triste, para contentarlo más que nada, para contentarlo. De pronto se le enciende el rostro y me habla de marzo y de abril, y de un refrán que tiene que ver con ellos y con mi mayo. A menudo le pongo cara de impaciente, “háblame de mayo, de mayo”.
Vivo siempre en mayo, nunca he vivido en otro lugar ni creo que fuese capaz de hacerlo. Cierto que para vivir aquí he de dejar pasar a menudo un tiempo. A veces es un tiempo de ausencias, otras simplemente un goteo casi interminable de minutos, las más simplemente un descuido cuyo mayor logro es conseguir que envejezca un poco por fuera. Por lo demás ya sabéis, si queréis venir a mi casa ahí es donde vivo, en mayo.
Y ahora escucha esto...

Sueño

Sueño